La banda volvió anoche a los escenarios y lo hizo a los grande: en el Independencia y ofreciendo, nada menos, casi tres horas de música. Pasaron las canciones nuevas y las de siempre. Mirá la galería de fotos y videos de ese show.
por Walter Gazzo
Se notó que había ganas contenidas. Tal vez, hasta nerviosismo a pesar de la larga experiencia. Se notó que Roberto Fiat se equivocó de letra en dos canciones seguidas; que Sergio Bonelli tuvo que afinar más de una vez su guitarra; que todos se miraron desconcertados porque no sabían cuando terminar “Mamá Blues”. Se notó que el público estaba ansioso por volver a escucharlos. Y tanto se notó la vuelta de Los Alfajores de la Pampa Seca a los escenarios que se tomaron tres horas de la noche del sábado para desandar canciones de hoy y de siempre, como para que nadie se quedara con las ganas.
Este tercer regreso después de la separación fue el más contundente, el más organizado y, seguramente, el más expectante ya que los otros dos fueron en festivales donde todo –calidad y cantidad- estaba asegurada.
Entonces, en la noche del sábado habría que demostrar los pergaminos de la banda para que todos se fuesen felices.
Así, el Independencia lució lleno en un ochenta por ciento y la gente fue fiel, como siempre le fue a uno de los grupos más menducos que ha tenido la historia de nuestro rock, dueños de un sonido propio y de letras urbanas, altamente identificables. Eso si, LAPS volvieron como siempre, es decir con una puesta de de luces muy austera, con cero escenografía, con una pantalla que lució en los primeros 30 segundos del show y después nunca más, sin asistentes de escenario y con ese glamour zanjonero que siempre los caracterizó. Consecuentes: siempre fueron así. Y apostaron todo a las canciones, y los discursos de Sergio Bonelli.
La primera parte del recital fue para mostrar las canciones de “20 años… ya es algo!”, el disco que ya está a la venta en todos los quioscos mendocinos y en la segunda –que arrancó con un set acústico- pasaron los grandes éxitos de la banda, matizados con invitados especiales que le dieron otro colorido a las canciones. Y cada tema tuvo historia, anécdotas, diálogo con la gente y un clima especialmente creado para disfrutarlo de la mejor manera.
No vamos a analizar acá el talento de Carlos Casciani, Sergio Bonelli, Gerardo Lucero y Roberto Fiat, porque es notorio y sabemos que estos muchachos dan eso y más aún. Pero hubo momentos en que los notó atados, contenidos y todo eso le restó espontaneidad a un show que lo supo tener.
Igualmente, y por los comentarios recibidos desde arriba y abajo del escenario, Los Alfajores seguirán caminando por los escenarios mendocinos, y esa es una buena noticia. Seguramente ya vendrá ese show despojado de formalismos que les permitirá mostrarse tal como son: una banda de garage.
Los Alfajores de la Pampa SecaLugar: Teatro IndependenciaDía: Sábado 15 de agostoMúsicos: Carlos Casciani (batería); Gerardo Lucero (bajo); Sergio Bonelli (guitarra y voz) y Roberto Fiat (guitarra y voz).Invitados: Ayelén Bonelli (coros), Paula Casciani (coros), Mingo Casciani (percusión), Diego Fiat (guitarra), Víctor Sileoni (violín), Fabio Garro (clarinete) y Pablo “Soplete” Quiroga (armónica).
por Walter Gazzo
Se notó que había ganas contenidas. Tal vez, hasta nerviosismo a pesar de la larga experiencia. Se notó que Roberto Fiat se equivocó de letra en dos canciones seguidas; que Sergio Bonelli tuvo que afinar más de una vez su guitarra; que todos se miraron desconcertados porque no sabían cuando terminar “Mamá Blues”. Se notó que el público estaba ansioso por volver a escucharlos. Y tanto se notó la vuelta de Los Alfajores de la Pampa Seca a los escenarios que se tomaron tres horas de la noche del sábado para desandar canciones de hoy y de siempre, como para que nadie se quedara con las ganas.
Este tercer regreso después de la separación fue el más contundente, el más organizado y, seguramente, el más expectante ya que los otros dos fueron en festivales donde todo –calidad y cantidad- estaba asegurada.
Entonces, en la noche del sábado habría que demostrar los pergaminos de la banda para que todos se fuesen felices.
Así, el Independencia lució lleno en un ochenta por ciento y la gente fue fiel, como siempre le fue a uno de los grupos más menducos que ha tenido la historia de nuestro rock, dueños de un sonido propio y de letras urbanas, altamente identificables. Eso si, LAPS volvieron como siempre, es decir con una puesta de de luces muy austera, con cero escenografía, con una pantalla que lució en los primeros 30 segundos del show y después nunca más, sin asistentes de escenario y con ese glamour zanjonero que siempre los caracterizó. Consecuentes: siempre fueron así. Y apostaron todo a las canciones, y los discursos de Sergio Bonelli.
La primera parte del recital fue para mostrar las canciones de “20 años… ya es algo!”, el disco que ya está a la venta en todos los quioscos mendocinos y en la segunda –que arrancó con un set acústico- pasaron los grandes éxitos de la banda, matizados con invitados especiales que le dieron otro colorido a las canciones. Y cada tema tuvo historia, anécdotas, diálogo con la gente y un clima especialmente creado para disfrutarlo de la mejor manera.
No vamos a analizar acá el talento de Carlos Casciani, Sergio Bonelli, Gerardo Lucero y Roberto Fiat, porque es notorio y sabemos que estos muchachos dan eso y más aún. Pero hubo momentos en que los notó atados, contenidos y todo eso le restó espontaneidad a un show que lo supo tener.
Igualmente, y por los comentarios recibidos desde arriba y abajo del escenario, Los Alfajores seguirán caminando por los escenarios mendocinos, y esa es una buena noticia. Seguramente ya vendrá ese show despojado de formalismos que les permitirá mostrarse tal como son: una banda de garage.
Los Alfajores de la Pampa SecaLugar: Teatro IndependenciaDía: Sábado 15 de agostoMúsicos: Carlos Casciani (batería); Gerardo Lucero (bajo); Sergio Bonelli (guitarra y voz) y Roberto Fiat (guitarra y voz).Invitados: Ayelén Bonelli (coros), Paula Casciani (coros), Mingo Casciani (percusión), Diego Fiat (guitarra), Víctor Sileoni (violín), Fabio Garro (clarinete) y Pablo “Soplete” Quiroga (armónica).
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